¿Vives o sólo estás vivo?
Autora: Ana M. Hidalgo
Hay grandes diferencias entre vivir y estar vivo.
Algunas personas dicen estar hartas de vivir, sin embargo, en la mayoría de los casos, la realidad es que en verdad no viven, sólo se limitan a estar vivos.
Vivir no significa necesariamente subir una alta montaña, o lanzarse en paracaídas, pero cierto es que estas actividades pueden hacerte sentir vivo.
Vivir es algo más sencillo de lo que a priori puede parecer, y sin embargo, es algo que no se hace con frecuencia.
¿Qué es vivir?
Como dijo William Wallace: “Todos los hombres mueren, pero no todos los hombres viven”.
Bajo la misma idea Óscar Wilde dijo: «Lo menos frecuente en este mundo es vivir, la mayoría de la gente existe, eso es todo».
Vivimos encadenados a rutinas que no nos acercan a lo que buscamos de la vida.
A día de hoy se priorizan cosas que en realidad sólo deberían ser secundarias.
Se prefiere trabajar más para conseguir un televisor de plasma con la última tecnología antes que pasar tiempo jugando con los hijos, hablando con amigos o contemplando un bello paisaje.
Nos intentan hacer creer que la felicidad está en poseer cosas, permanecer eternamente jóvenes o en acumular caras vacaciones…pero todo es más sencillo:
La felicidad podemos encontrarla dentro de nosotros mismos, de nuestras experiencias y emociones y para ello no necesitamos necesariamente gastar dinero.
Bajo mi punto de vista…
- Vivir es dinamismo, es alegría, es gratitud por lo que tenemos, somos y experimentamos.
- Pienso que vivir es disfrutar de placeres elementales como saborear un buen plato o de la belleza que nos rodea.
- Vivir es reír y llorar, ganar y perder.
- Es apreciar la diversidad y disfrutar de ella.
- Vivir es apreciar el silencio y saber gritar, correr, saltar, cantar, es movimiento…
Para no resignarnos a estar vivos y conseguir llegar a VIVIR, lo mejor es tener metas y objetivos, tener grandes pasiones que nos muevan y nos empujen a seguir adelante, que nos ayuden a conservar la curiosidad, el entusiasmo y las ganas de aprender y mejorar.
En otros post ya he hablado de cómo lograr las metas que nos proponemos y cómo podemos aprender a rejuvenecer nuestra mente, te invito a que les eches un vistazo.
Hoy te dejo estos sencillos consejos para aprender a vivir sin limitarte a estar vivo:
Conócete a ti mismo.
Averigua qué te estimula, qué te alegra, qué deseas… de este modo podrás construir objetivos y metas que se ajusten a tus necesidades e inquietudes.
Aprende a cuidarte en el más amplio sentido.
Trata bien tu cuerpo, alimenta tu mente, fortalece tu salud…
Enfrenta las dificultades como retos.
La vida puede asemejarse a un juego si así la planteas. Diviértete y aprende a lo largo del camino siempre que puedas.
Implementa buenos hábitos en tu vida y desecha aquellos que no te benefician.
Cultiva la amistad y las relaciones sociales.
Está demostrado que somos más felices cuando nos rodeamos de personas con las que conectamos.
Date caprichos de vez en cuando.
Prémiate por tu trabajo y por ser quien eres.
Crea momentos de calidad en tu vida y en la de los demás.
Recuerda que hacer feliz a los demás es más sencillo de lo que crees
Adáptate a las circunstancias sin renunciar a ser quien eres.
Y sobre todo, simplifica:
Vivir es más sencillo de lo que a vece creemos. Como bien dicen:
«Si quieres ser amado, ama; cuando extrañes, llama; Si quieres ver a alguien, invita; cuando quieras que te comprendan, explica de nuevo; Si tienes dudas, pregunta; cuando algo no te guste, deséchalo, pero si te gusta, cuídalo; Si tienes metas, cúmplelas; cuando te equivoques, aprende; Si lastimas, discúlpate ; cuando te hieran, perdona; Si quieres sentirte vivo, descubre y haz aquello que te motiva…»
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Cuanto más personas despierten, más personas habrá VIVAS.
Si deseas recibir mi ayuda profesional, puedes contactar conmigo a través de este enlace, estaré encantada de ayudarte.
Ana M. Hidalgo
Sobre la autora:
“Soy Ana Hidalgo, psicóloga de profesión y persona como tú, con grandes experiencias tanto a nivel personal como profesional.
Me dedico a ayudar a personas a superar situaciones difíciles y salir fortalecidas de ellas.
Si quieres recibir semanalmente artículos sobre amor, desamor y relaciones en general, suscríbete gratis a mi blog en terapiaconAna.com”
Hola Ana:
En primer lugar te doy la sgracias por compartir este artículo maravillo, «¿Vives o sólo estás vivo?». Yo cambiaría el título por «¿VIVES O SIMPLEMENTEE EXISTES?» Existir, existimos todos, pero lamentablemente pocos viven. Hay una gran diferencia entre existir y vivir. La existencia (el existir) carece de propósito, ganas, energía…etc. mientras que la vivencia (el vivir) es lo opuesto. Si sólo existes, casi mejor estar muerto, ¿no? ¿Para qué vives si no tienes ganas en tu vida – no tienes un ‘¿para qué’ (propósito) y chispa? Los zombies son así llamados – muertos «vivientes» o mejor todavía, son muertos existentes. Vivir va más allá que sólo existir; los diferencio muy claramente. Las ratas y los buitres también existen y creo que no «viven» según mi concepto de VIVIR, y hay personas que incluso son peores que las ratas y los buitres –dependen de los demás– son parásitos. Muchas veces consciente o inconscientemente queremos algo de los demás. Vivir es no desear, no querer nada de nadie. Somos «fuentes»; al igual que las fuentes, sólo dan. Con esto no quiero decir que rechaces lo que te dé la gente sino recíbelo con gusto y dignidad. Si te dan, bien y si NO también. El tema es no depender de ella mental, sentimental y emocionalmente (materialmente sí, pero incluso esto NO DEPENDER). Somos «fuentes»! He oído que mucha gente dice, «No espero nada de nadie» ¿De verdad que no espera nada de nada de nadie? Hagamos una prueba: Da cualquier cosa a la gente y si no te dicen «¡Gracias!», honestamente ¿cómo nos sentimos? No nos engañemos, las 24 horas del día siempre esperamos algo de alguien, incluidas las ‘Gracias’ y ya no hablamos a nivel emocional. Buscamos de alguien a este nivel. Está bien que esperamos a que el butanero nos traiga la bombona, los barrenderos a que limpien mi calle… y etc. La sociedad está hecha así- esperar a que alguien haga algo por nosotros a niver MTERIAL, pero no a nivel EMOCIONAL ni siquiera de nuestras parejas, padres o hermanos o de nadie. Repito, a nivel MATERIAL, ¡SÍ! Lo otro ¡NO! que sino creamos una dependencia emocional.
– – – –
Ross Galán, Ph. D
Rosa, si bien estoy de acuerdo en casi todo tu comentario, tendria mas cuidado en este parrafo. En primer lugar te doy las gracias por compartir este artículo maravillo, “¿Vives o sólo estás vivo?”. Yo cambiaría el título por “¿VIVES O SIMPLEMENTEE EXISTES?” Existir, existimos todos, pero lamentablemente pocos viven. Hay una gran diferencia entre existir y vivir. La existencia (el existir) carece de propósito, ganas, energía…etc. mientras que la vivencia (el vivir) es lo opuesto. Si sólo existes, casi mejor estar muerto, ¿no? ¿Para qué vives si no tienes ganas en tu vida – no tienes un ‘¿para qué’ (propósito) y chispa? Los zombies son así llamados – muertos “vivientes” o mejor todavía, son muertos existentes.
Estoy pasando justamente por un momento asi y realmente es un tanto peligroso lo que decis. Si es casi mejor estar muerto, me tengo que matar?
Hola Sandra, gracias por comentar.
Hay momentos en la vida en los que podemos sentir cierta apatía, no sé si será este el caso que comentas por el que estás pasando. Te animo a que indagues en qué quiere comunicarte esta emoción pues muchas veces entremezclamos emociones diferentes. Por ejemplo, no es lo mismo que no te apetezca hacer nada en absoluto, que te haya dejado de gustar algo con lo que antes disfrutada, o que estés teniendo una duda existencial sobre cuál es tu propósito de vida.
Explorar tus emociones más a fondo te llevará por caminos distintos. Al fin y al cabo, apatía, abulia, acedía o tedio son emociones que tienen algo que decirte para que mejores tu vida.
Un saludo.
Gracias por compartir tu opinión Ross