mi pareja quiere el divorcio, qué hago

Qué hacer si tu pareja quiere el divorcio

Autora: Ana Hidalgo

Mi pareja quiere el divorcio, ¿qué hago?, ¿qué va a pasar ahora con nuestra vida?, ¿puedo negarme?

Si tú también has vivido esta situación, es posible que cientos de preguntas te hayan llegado a la cabeza. En este artículo trataré de ayudarte a darle respuesta a algunas de ellas.

 ¿Qué hacer cuando tu pareja quiere el divorcio?

Aunque algunos pueden sentir el divorcio como un alivio o una forma de escapar de una situación tóxica, para otras personas el que su pareja hable de divorcio puede llevarlos a sentirse muy hundidos y perdidos. Si este es tu caso, te animo a que sigas leyendo.

1.      Antes que nada, tantea el terreno.

Tanto si te ha pillado por sorpresa como si no, el primer paso sería informarse. No es lo mismo que se trate de una decisión en firme a que sea una propuesta.

Si es una decisión en firme:

Si tu pareja ya ha decidido divorciarse de ti, no te quedan muchas opciones al respecto. Puedes enfadarte, patalear y coger una rabieta, pero si la decisión es inamovible, finalmente os divorciaréis.

• Ana, pero ¿qué pasa si me niego a que nos divorciemos, eso no lo frenaría?

Lo cierto es que no. Si uno de los dos quiere divorciarse, aunque el otro se niegue, lo más probable es que el divorcio siga adelante. En estos casos la negativa a aceptar la situación sólo entorpecerá la posibilidad de hacerlo amigablemente. Legalmente, basta con que uno de los dos solicite el divorcio para que pueda ponerse en marcha y llegar a término.

Ahora bien, a lo que sí puedes negarte es a las condiciones concretas que tu pareja proponga. En este caso, tendréis que llegar a acuerdos. Bien por vosotros mismos, bien por mediación familiar, abogados y/o jueces.

En cualquier caso, armarse de paciencia y calma será imprescindible.

• ¿Y si quiere divorciarse, pero no me da ninguna razón válida?

No importa si te da o no explicaciones de su decisión, eso no cambiará el hecho de que os vais a divorciar. Tu pareja está en su derecho de guardarse sus motivos para sí, por muy mal que esto pueda sentarte.

Ahora bien, si tú necesitas algún motivo, ten en cuenta que estos suelen ser los más comunes: la relación está muy desgastada por conflictos frecuentes; hay terceras personas; tenéis intereses o valores incompatibles; aunque puede que siga habiendo cariño, ya no hay amor de pareja entre vosotros; hay maltrato físico o verbal…

Cuando la decisión está en el aire:

Si todavía no hay una decisión tomada sino una propuesta de divorcio, mi mejor recomendación es pedir ayuda. La terapia de pareja os servirá muchísimo a poner las cartas sobre la mesa, aclarar la situación y tomar la mejor decisión posible.

• Ana, si mi pareja quiere el divorcio, ¿qué hago, le propongo la terapia de pareja?

Exacto, creo que puede ser una muy buena forma de quemar el último cartucho de la relación. Aunque eso sí, no te hagas falsas ilusiones. Como vengo repitiendo en tantísimos artículos, la terapia de pareja no es un pegamento de parejas. Con ella lo que conseguiréis es coger una mayor perspectiva a la hora de analizar la relación y aprenderéis herramientas adecuadas a vuestra situación concreta. De esta forma, tanto si el divorcio se produce como si no, ambos podréis estar mejor y podréis estar más alerta para evitar errores futuros.

En terapia de pareja veo muchas parejas que consiguen solucionar crisis importantes como infidelidades, o problemas de comunicación, daos una oportunidad antes de tirar la toalla.

2.      Aprende a manejar las emociones

Si tu pareja te ha pedido el divorcio está claro que no estáis en vuestro mejor momento y que vuestra situación es delicada. Aprender a manejar las emociones en estos momentos será especialmente importante.

Es muy probable que te sientas en una montaña rusa emocional. Tan pronto sientes enfado por lo que está pasando, como miedo, asco, tristeza, indefensión…

Estarías como el monstruo de los colores, con todas las emociones mezcladas. En estos momentos contar con ayuda psicológica profesional suele ser un gran acierto.

En cualquier caso, tanto si decides afrontarlo por tu cuenta como con ayuda, vas a tener que emprender dos acciones clave: prepararte para transitar varios duelos y buscar apoyos.

– Si mi pareja quiere el divorcio, qué hago, ¿experimentaré varios duelos?

Sé que no suela muy alentador, pero lo cierto es que la experiencia me ha demostrado que ante un divorcio se producen varios duelos. Me explico:

Si buscas en la Wikipedia verás que “el duelo es el proceso de adaptación emocional que sigue a cualquier pérdida”. Sí, has leído bien, ante cualquier tipo de pérdida.

Como sabes, ante un divorcio se pierden muchas cosas, de ahí que haya varios duelos. Entre las pérdidas más comunes están:

• Pérdida de la pareja (entendida como relación) y también pérdida de la pareja entendida como la persona (quien te acompaña, habla contigo, comparte tiempo…)
• También se pierden vuestros sueños y planes de futuro compartidos.
• Toca repartirse amigos e hijos (pierdes la posibilidad de verlos a diario, por ejemplo).
• Pierdes el contacto con algunos familiares y conocidos
• En ocasiones también se pierde la vivienda, el coche, la mitad de tu mobiliario…

Es decir, haz acopio de clínex porque es posible que te toque llorar. La buena noticia es que hacerlo, llorar, te ayudará a ir sanando la herida y avanzar por las distintas fases del duelo.

• Entonces, ¿voy a estar llorando y ya está? Vaya ánimos que das, Ana

No, la tristeza es sólo una de las fases del duelo, y para salir de ella te hará falta buscar apoyos. Además, no todo el mundo lo vive con igual intensidad, cada caso es distinto.

¿Cómo puedo buscar apoyos si mi pareja quiere el divorcio?

Antes que nada, debes saber que hay muchos tipos de apoyos. De hecho, te vendrá muy bien contar tanto con apoyos internos como externos.

Tus apoyos internos son los que tú mismo/a puedes facilitarte y que te ayudarán a hacer más llevadero tus duelos. Me refiero, por ejemplo, a aferrarte a tus hobbies y pequeñas alegrías diarias que te servirán de distracción. Tener una autoestima fuerte, por ejemplo, también te llevará a apreciar los puntos buenos de esta situación. Sí, los hay aunque te cueste verlos. De hecho, ya hablé de ellos en otro artículo, pincha aquí para leerlo.

Además, si este proceso te desgasta demasiado y no encuentras ningún apoyo interno, todavía tienes los externos para ayudarte. En cualquier caso, ve con cuidado pues si no encuentras internos puede que estés entrando en un proceso depresivo.

En cuanto a los apoyos externos, son los que consigues fuera de ti. Desde amigos y familiares o compañeros de trabajo, hasta atención psicológica individual donde poder desahogarte abiertamente.

En cualquier caso, necesitarás contar con momentos para reírte y distraerte, pero también momentos para estar triste y llorar tus penas o enfadarte y gritar. De esta forma tu vida se irá equilibrando de nuevo, poco a poco.

3.       Recuerda lo que de verdad es importante

Si tu pareja quiere el divorcio recuerda estos 5 aspectos:

• Llora siempre que lo necesites y, de igual modo, no te sientas mal por divertirte, es más importante de lo que crees.
• Esto es el fin de una etapa, pero también el inicio de otra nueva. No tiene por qué ser ni mejor ni peor, tan sólo diferente. Puedes echarle un vistazo a otro de mis posts sobre cómo reinventarse tras el divorcio.
• Si el divorcio es inminente, ten en mente que, como dicen los abogados: “es mejor un mal acuerdo que un buen pleito”. Alargar la situación sólo os causará más dolor y batallas.
• Será un buen momento para sacar tu resiliencia a relucir y fortalecerla.
• No tienes por qué hacerlo solo/a. Si necesitas ayuda profesional, me tienes a tu disposición.