Técnica para distinguir prioridad y dependencia emocional
Autora: Ana Hidalgo. Psicóloga.
En ocasiones, dejamos atrás nuestras prioridades creyendo que es amor, pero, ¿realmente es prioridad a la pareja?
En muchos casos, prioridad y dependencia emocional van unidas, es por eso que te reto a ponerte a prueba.
Si eres de las personas que tienden a poner en primer lugar a su pareja, quizás debas replantearte si realmente es prioridad a la pareja o hay algo más.
Hoy te invito a reflexionar sobre ello para que puedas revisar tu caso concreto desde otra perspectiva. Es por eso que te comparto un ejercicio que se realiza en terapia a fin de aclarar si hay dependencia.
¿Lo mío realmente es prioridad a la pareja?
Muchas personas confunden el priorizar con depender. Se centran en su pareja por encima de todas las cosas, incluyendo a sí mismo, cualquier otra persona o situación.
Ojo, no quiero decir que todas las personas que prioricen a su pareja no lo hagan por amor, cada caso es distinto. Sin embargo, debemos estar alerta ante ciertas señales.
Ya te hablé de ello en el artículo cómo saber si tengo dependencia emocional. Puedes leerlo pinchando aquí.
No obstante, te recuerdo algunos factores específicos de las personas dependientes: miedo a la soledad, al rechazo o abandono, deseo de exclusividad, necesidad de acceso a la pareja, autolimitación…
Obviamente, estos factores deben estar dentro de un contexto.
Es probable que quieras tener cierto acceso a tu pareja si os mudáis a un país desconocido, del que no sabes el idioma, no conoces a nadie, y para colmo no llevas dinero encima. En una situación así, es lógico querer estar con alguien conocido, y eso no significa que tengas dependencia emocional.
Te he puesto un ejemplo muy extremo para que tengas presente que la dependencia emocional no es algo dicotómico. Existen muchas variables a tener en cuenta a la hora de realizar un diagnóstico al respecto.
Por eso, aunque el ejercicio que te propongo a continuación te ayudará a tener una idea aproximada sobre si lo tuyo realmente es prioridad a la pareja o no, no debes tomarlo como un diagnóstico, pues hay más variables en juego.
Ahora bien, te animo a remangarte y hacer el siguiente ejercicio. Te ayudará a tener idea sobre el tipo de relación que tienes.
Revisando tu prioridad y dependencia emocional. Técnica de los dos círculos.
Paso 1
Para empezar, te voy a pedir que dibujes un círculo que represente tu espacio vital actual. Esto es: tus gustos, intereses, inquietudes, amistades, aficiones… que mantienes y realizas a día de hoy.
Cuantas más inquietudes tengas, más grande necesitarás que sea tu círculo.
Una vez hecho esto, toca algo muy sencillo: escribe tu nombre dentro.
Ahora bien, dado que vamos a revisar la prioridad y dependencia emocional respecto a tu pareja, necesitaremos también representarla.
Dibuja al lado otro círculo que represente a tu pareja en la actualidad. Su círculo, no tiene por qué tener el mismo tamaño, sino que debe ajustarse a sus intereses, gustos e inquietudes actuales.
Una vez lo tengas, escribe su nombre dentro.
A continuación, realiza el mismo ejercicio, pero en relación a tus intereses e inquietudes pasados. Haz lo mismo con su círculo.
Ahora plantéate, ¿ha variado el tamaño de tu círculo o del suyo?, si es así, ¿ha crecido o ha menguado?
Así, puedes reflexionar sobre cuántos de tus gustos y aficiones has abandonado o adquirido en este tiempo.
¿Estáis creciendo el uno al lado del otro?
Paso 2
Ahora que ya sabes el tamaño aproximado de cada círculo, vamos a comprobar vuestra afinidad.
Vuelve a dibujar los dos círculos, pero esta vez tendrás que acercarlos. La intersección de ambos círculos representará el espacio en el que tu pareja y tú coincidís a día de hoy. Esto es, la intersección representará vuestros puntos en común.
De esta forma, la intersección será mayor cuantas más afinidades tengáis y menor cuantos menos puntos en común compartáis.
Así, si un círculo cubre al otro, quiere decir que todo lo del círculo menor lo comparte con el mayor. Por el contrario, si no hay punto de intersección quiere decir que no compartís nada en común.
Por ahora es sencillo, como ves.
Con este segundo paso podréis ver vuestros puntos en común, en cuanto a intereses y aficiones, a día de hoy.
Una vez hecha la figura, responde sinceramente: cuando os conocisteis, al inicio de vuestra relación, ¿teníais estos puntos en común?, ¿os gustaban a ambos estas mismas cosas?
Puede que sí o puede que no, no pasa nada. Al fin y al cabo, es esperable que a medida que pasa el tiempo y vivimos más experiencias, vayamos cambiando.
Continuemos con el ejercicio. Si vuestros gustos e intereses han cambiado desde que os conocisteis, dibuja otros dos círculos representando cómo eran al principio.
¿Qué sientes?, ¿en tu opinión compartís ahora más o menos intereses comunes?
En caso de que no se hayan movido nada, quiere decir que ninguno de los dos ha influido en el otro respecto a este tema.
Paso 3
Finalmente, quiero que echemos un vistazo a cómo ha evolucionado vuestra relación. Veamos si realmente es prioridad a la pareja o no.
Sobre los círculos que representaban vuestra situación actual dibuja una línea vertical. Ésta representará la distancia entre los dos al inicio de la relación.
Si crees que estás donde estabas, la línea tocará el borde de tu círculo sin cortarlo, no se moverá. Sin embargo, si crees que tus intereses se han movido, esa línea pasará por encima de tu círculo. En la figura represento esta segunda opción. La línea se moverá más o menos en función de lo que tú te hayas movido.
Por ejemplo, si antes no te gustaba el fútbol y a tu pareja sí, y a ti sigue sin gustarme, la línea estará en el borde. Ahora bien, si ahora sí te gusta, o al menos lo ves junto a tu pareja, la línea se desplazará. Esto quiere decir que has ampliado tus intereses creando intereses comunes.
De esta manera, podrás ver gráficamente cómo has modificado tus gustos y comportamientos desde el inicio de vuestra relación. Podría decirse que esta línea representa el terreno cedido o conquistado.
A continuación, plantéate, ¿tus nuevas aficiones van en dirección a tu pareja?, ¿has tenido que renunciar a algunas tuyas para darles tiempo o espacio a estas nuevas aficiones?
¿Estás renunciando a una parte de ti para ampliar vuestros puntos en común?, ¿realmente es prioridad a la pareja o abandono hacia ti mismo/a?
Atención a lo que muestran tus círculos
Especialmente si vuestros círculos han tendido a la fusión y tu línea se ha movido mucho, reflexiona sobre si realmente es prioridad a la pareja el motivo del cambio. Plantéate: ¿podría estar influyendo el querer agradar, el miedo a la soledad o la necesidad de contacto con tu pareja?
Además, si en este tiempo te has movido mucho hacia tu pareja, es importante que te plantees cómo ha sucedido.
A veces, resulta sencillo caer en la sumisión y pasividad para evitar peleas o pasar más tiempo en pareja. De esta forma, se tiende al retraimiento, la inhibición y el olvido de los propios intereses, derechos y sentimientos.
En estos casos, se cree que se renuncia a ellos por amor, por dar prioridad a la relación de pareja, pero ¿lo realizas porque realmente es prioridad a la pareja?
Plantéate hasta qué punto has cambiado tu forma de vestir, tus hábitos deportivos o religiosos, las visitas a familiares, amigos…
Y, sobre todo, qué te mueve a esos cambios: si lo haces por agradar, por presión, evitar conflictos…
¿Hasta qué punto afectaría negativamente a tu relación si ya no se mantuviesen estos cambios?
Este ejercicio es sólo para ti, cuanto más sincero/a seas, más te aportará a la hora de valorar tu relación.
No obstante, si quieres profundizar más sobre tu relación o revisar tu dependencia emocional, me tienes a tu disposición.
Puedes contactarme a través de es link o, si lo prefieres, reservar directamente tu cita pinchando aquí.
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