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La ley del hielo en pareja

Autora: Ana Hidalgo, psicóloga

Una de las frases que más escucho en terapia es esa de “mi pareja me castiga sin hablar.”

Es más, este silencio puede llegar a durar semanas, o incluso meses, según me comentan algunos.

Cuando pregunto sobre cuál creen ellos que es el motivo de ese silencio, suelo escuchar respuestas como:

– Ana, mi pareja siempre quiere salirse con la suya, no le interesa resolver la situación, sólo quiere ganar.

– Si no me habla es porque quiere castigarme, imponer su postura y demostrar así que yo soy culpable.

No sé si en alguna ocasión has sufrido este silencio o lo has ejercido. Sin embargo, la realidad no siempre es tan sencilla como nos creemos.

¿Por qué mi pareja me castiga sin hablar?

Como sabes, no es lo mismo guardar silencio un lapso breve de tiempo, que mantenerlo días o semanas.

Sin embargo, tras una discusión, cada persona maneja los sentimientos, que la discusión le ha provocado, de una manera distinta.

Hay quienes se enfadan, pero también hay quienes se entristeces y quienes se alegran de haberlo hablado, aunque sea discutiendo.

En ocasiones, el silencio puede ser por castigo, como mis clientes suelen señalar, pero otras pueden ser por intentar controlar las propias emociones, por tratar de alejarse u olvidar a la otra persona, por no saber cómo lidiar con la situación… Cada uno tiene sus propios motivos.

Algunos pensamientos habituales que suelen estar en la persona que guarda silencio son:

  • Para qué hablar, si no me entiende.
  • Si no hablamos al menos así no discutimos y podemos pasar unos días más tranquilos.
  • Me hizo mucho daño, primero tiene que disculparse por ello.
  • Esta vez no pienso ceder, siempre me toca a mí ser quien ceda.
  • El enfado que tengo es tan grande que si hablo sólo voy a estropear más la situación.
  • No me siento capaz de hablar sobre ese tema, quizás así podamos olvidarlo.

Es por eso que es importante entender que no siempre que recibimos silencio como respuesta es por castigo.

Pero, ¿y si es cierto que mi pareja me castiga sin hablar?

Al igual que podemos asumir que existen muchos motivos por los que alguien puede guardar silencio, también es necesario asumir que sí, ciertamente el silencio puede usarse como forma de castigo.

Es más, castigar a alguien así se conoce como la ley del hielo en pareja. Veamos en qué consiste.

¿Qué es la ley del hielo en pareja?

La ley del hielo en pareja puede ser considerada una forma de maltrato encubierto. Es una respuesta pasivo agresiva que lastima enormemente a quien la sufre.

Como decía, no todos los silencios tienen una forma de castigo encubierta, por lo que hay que tener cuidado a la hora de señalarlo.

Dicen que lo contrario del amor no es el odio, sino la indiferencia. Y es así porque duele mucho más.

Hay que tener en cuenta que el hacer el vacío a alguien, en realidad no sólo se da en las parejas. En muchas ocasiones, la ley de hielo se puede aplicar en un contexto laboral, por ejemplo, en el mobbing.

A priori, puede parecer una técnica bastante infantil. Sin embargo, va mucho más allá. La manipulación y el deseo de hacer daño en forma de castigo están muy presentes.

De hecho, las víctimas de la ley del hielo en pareja, suelen sentir gran tristeza y van perdiendo su seguridad.

Se cuestionan así mismas pensando: “¿seré yo tan malo/a?”, “¿qué he hecho para merecer esto?”

Es por eso que, si este tipo de actitud se prolonga en el tiempo, pueden desarrollar depresión e incluso indefensión.

Este sentimiento de sentirse excluido y castigado, puede generar daños físicos. Entre ellos, dolores de cabeza, falta de concentración, aumentar la presión arterial, insomnio…

Aunque pueda sonar paradójico, este silencio puede generar los mismos daños que el maltrato verbal.

Es una forma de imponer poder sobre la otra persona, de manipular y abusar. De ahí que no sea una buena opción de respuesta.

¿Qué diferencia hay entre la ley del hielo en pareja y la técnica de tiempo fuera?

– Ana, en algunas ocasiones dejo de hablar a mi pareja, ¿eso significa que la estoy maltratando?

Como subrayaba, la duración que se mantiene el silencio, así como su finalidad marcan una importante diferencia.

Darse tiempo para reflexionar y no decir algo hiriente cuando uno está alterado, puede ser una técnica muy beneficiosa para paliar discusiones. Esta técnica es la que se conoce como tiempo fuera.

Si recuerdas, cuando éramos niños, si alborotabas, la profesora te sacaba un tiempo al pasillo, fuera de la clase. Estaba empleando el tiempo fuera, darte un momento para recomponerte de tu agitación y después volvías a clase.

Este tiempo fuera duraba unos minutos, o como mucho te mantenían allí hasta el inicio de la siguiente hora.

En una relación de pareja sucede lo mismo. Puedes dar un tiempo para que ambos os calméis saliendo de la habitación o manteniendo cierto silencio. Ahora bien, una discusión no debería mantenerse abierta más de 1 día, y el silencio, bastante menos.

Por eso, el tiempo que se produce el silencio y la intención con la que se realiza es bastante importante.

Sería bueno que ambos acordaseis una palabra clave que indicase que ese silencio será simplemente un tiempo fuera. Por ejemplo, podéis decir “pausa” para parar la discusión hasta que estéis más calmados. Durante esa pausa, podéis guardar silencio o bien cambiar de tema, y no podrá prolongarse todo el día.

¿Qué puedo hacer si mi pareja me castiga sin hablar?

No siempre es fácil romper con una situación de silencio, sea o no por castigo de tu pareja. Es por eso que te animo a plantearte distintos aspectos:

  1. Reconoce su enfado

Deja de intentar averiguar qué le pasa a tu pareja y de perseguirla. No entres en su juego.

Simplemente, indícale que te das cuenta de que está enfadado/a.

  1. Muestra tu predisposición al diálogo

Anuncia a tu pareja tu deseo de cambiar las cosas.

Esto debe ser algo sincero, de no ser así, aprovecha este silencio para seguir reflexionando.

Ten en cuenta que quizás necesitéis que las cosas cambien, o que las cosas terminen, cada caso es diferente.

De hecho, como sabes, continuar una relación no siempre es bueno, puede ser dañino si la relación es tóxica.

Ahora bien, como es tu pareja quien no habla, señala en tu discurso que está en sus manos solucionar o no las cosas. Subraya el hecho de que estarás abierto/a a buscar soluciones conjuntas, pero que no podréis hacerlo mientras mantenga su actitud.

  1. Hazle saber los posibles daños en la relación

Explica a tu pareja que su actitud de silencio puede llevarte a malinterpretar su comportamiento y las dimensiones del problema.

Por ejemplo, puede llevarte a pensar mal de él/ella, de la relación, creer que ya no hay amor o interés…

Es por eso, que puedes señalarle lo importante que sería para ti poder hablar y solucionar las cosas antes de que empeoren.

Tras darle esta información, puedes retirarte con la cabeza bien alta, ya hiciste lo que estaba en tus manos.

  1. Analiza el tipo de relación que tienes

Plantéate si estás o no dentro de una relación tóxica. Esto puede ayudarte a abrirte los ojos sobre lo que en realidad está pasando.

Ten en cuenta que el silencio no siempre indica que la relación sea tóxica, sino que no está funcionando bien.

Revisa todos aquellos aspectos que sí están funcionando y los que deben cambiar o modificarse. Esto te ayudará a coger mayor amplitud de perspectiva y entender las responsabilidades de cada uno.

 

Si continúa la situación por mucho tiempo, es el momento de plantearse el grado de crisis de pareja que estáis atravesando.

Plantearos la posibilidad de acudir a terapia de pareja como una forma de enfocar vuestra realidad bajo un prisma distinto.

Muchas veces el contar con un lugar seguro, fuera de ataques e insultos, y con una persona que medie entre ambos, puede ayudar mucho a manejar este tipo de situaciones y fortalecer la relación.

A este respecto, ya sabes que estoy a vuestra disposición. Puedes reservar tu cita pinchando aquí.

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